miércoles, 30 de enero de 2019

electrocardiograma vs vida


Esto es un electrocardiograma (ecg):


Un electrocardiograma es la representación gráfica de la actividad eléctrica del corazón. Como podréis apreciar, sobre la base de una línea isoeléctrica se ven unas ondas positivas (hacia arriba) y otras ondas negativas (hacia abajo), de diferente amplitud y duración y que coinciden con distintas fases de repolarización y despolarización en cada latido.
Pues bien, para mí, esta gráfica es también la representación de la vida. Tal cual. Porque en la vida hay momentos (y eventos) positivos y otros negativos que vivimos con más o menos intensidad y otros que son bastante planos. O sea, como una montaña rusa de emociones ¿no?
¿y qué pasa en un electrocardiograma cuando en el corazón no hay actividad eléctrica? Pues pasa esto:


Es decir, que no hay latidos y por tanto, en la gráfica sale una imagen plana.
¿Y qué pasa cuando la vida es “plana”? Pues pasa que no es vida, porque la vida necesita estímulos, variedad y cambios para que en vez de plana, sea plena ¿no os parece?
Pero aún voy más allá. Para hacer un electrocardiograma completo, se colocan diversos electrodos en el tórax y en las extremidades que recogerán la actividad eléctrica del corazón desde distintos puntos y entonces tendremos una gráfica (un ecg de 12 derivaciones) que sería algo así:


Si os fijáis, el mismo latido se ve de distinta manera dependiendo del electrodo que lo recoja. Y si os fijáis más, el mismo latido, visto en distintas derivaciones, se puede registrar como onda positiva de más o menos amplitud e incluso como onda negativa (y viceversa, claro).
Y vuelvo a comparar esta imagen con nuestra propia vida. Ningún hecho tiene significado por sí mismo más allá del que cada uno de nosotros le damos o le queremos dar. Dependiendo de donde pongamos el foco (el electrodo del ecg) podemos ver un mismo evento (latido)de distintas maneras (distintas derivaciones del ecg) y darle una interpretación más o menos positiva o negativa o, lo que es lo mismo, donde pones el foco (electrodo), pones tu atención y tu energía (derivación)y eso hace también que le des un significado u otro (ondas positivas o negativas) al mismo hecho (latido).Y si cambias el foco y cambias el significado, podrás mejorar tus decisiones porque tendrás mejores emociones.



domingo, 6 de enero de 2019

Día de Reyes: Regala(te) tu mejor versión

Todavía vivimos  en la creencia de que las buenas personas son las que piensan en los demás antes que en ellos mismos.
De  hecho, solo la idea de anteponerse uno mismo por delante de los demás nos suele generar un conflicto interior y nos provoca un estado emocional negativo.
Pero si cambiamos el enfoque, podemos comprobar que en realidad, esta es una creencia errónea, que hay que vivir de dentro hacia fuera y que no podemos ofrecer lo mejor al mundo y a las personas que nos rodean si no nos escuchamos a nosotros  mismos.
Y no se trata, para nada,  de un sentimiento egoísta, de pensar solo en nosotros y que el resto no nos importe una mierda, no. Precisamente, como nos importa el resto, pensamos en nosotros, intentamos mejorarnos a nosotros mismos e intentamos ser nuestra mejor versión para poder ofrecer a los demás lo mejor de nosotros.
No sirve de nada pensar en los demás cuando lo que les estamos ofreciendo no es nada positivo. Y es imposible que ofrezcamos algo positivo cuando nos estamos silenciando, cuando no nos estamos escuchando y cuando estamos haciendo lo que los demás quieren pero no lo que nosotros queremos.

Por eso os invito a que reflexionéis sobre ello, a que miréis en vuestro interior, os convirtáis  en vuestra mejor versión y ofrezcáis a todo el mundo que os rodea lo mejor de vosotros. Porque nadie puede ofrecer lo que no tiene.
-->
Realmente, mirándolo desde este punto de vista y dándole este nuevo significado, pensar en uno mismo deja de ser un acto de egoísmo para convertirse en un acto de generosidad.